Uno de los problemas a los que se enfrenta el planeta a nivel global son los niveles de emisión de CO2 a la atmósfera. Ante este grave problema que deriva en el conocido calentamiento global, surge la idea de la green logistics, es decir, logística verde que trabaja desde el mundo empresarial en medidas y alternativas, dentro de la actividad logística, para reducir y minimizar al máximo este impacto empresarial sobre el planeta.
Dicho de otra manera, esta nueva tendencia de las empresas por reducir su huella ecológica y minimizar su impacto en el entorno ha llegado también al ámbito logístico. Grandes empresas han decidido volverse green o, al menos, ser más ecológicas de lo que son actualmente.
El primero de ellos es el beneficio para la sociedad y el planeta. Un medio ambiente más limpio y verde quiere decir un entorno mejor y mayor calidad de vida para animales y seres humanos.
El segundo beneficio de la logística verde es el ahorro y optimización de recursos. Apostar por un transporte y reparto de mercancías más eficiente para reducir las emisiones en logística y por un aprovechamiento mejor de nuestros almacenes repercute directamente en un ahorro económico.
La imagen de marca que genera la apuesta verde es otro beneficio a destacar. Cada vez más consumidores valoran los esfuerzos que realizan las empresas para ser socialmente más responsables y esta concienciación empresarial puede ser utilizada por el branding para dar una imagen diferenciada respecto a la competencia.
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